La tecnología está impactando cada rincón de nuestra vida a una velocidad sin precedentes, y la Inteligencia Artificial es uno de los principales motores de esta transformación. Nos obliga a replantear cómo agregamos valor en nuestras organizaciones y en nuestra vida cotidiana. Las habilidades que nos llevaron al éxito en el pasado pueden volverse obsoletas si no aprendemos a adaptarnos a este ritmo frenético de cambio.
Aquí es donde muchos enfrentan el problema: mientras que la realidad avanza exponencialmente, nuestras habilidades para aprender y adaptarnos no siempre siguen el mismo ritmo. Los modelos tradicionales de formación y aprendizaje parecen quedarse cortos en un mundo que demanda respuestas ágiles, flexibles y adaptativas. Entonces, ¿qué podemos hacer para no quedarnos atrás?
La respuesta es directa pero desafiante: necesitamos aprender a aprender. Ese es el músculo que debemos ejercitar si queremos no solo sobrevivir, sino prosperar en esta nueva era.
El modo en que aprendemos está influenciado por nuestra cultura, nuestras experiencias y por cómo hemos sido socializados para enfrentar desafíos. En el contexto empresarial, esta diversidad de patrones de aprendizaje implica que los enfoques de capacitación y desarrollo deben ser adaptativos y personalizados para ser realmente efectivos.
Aquí entra en juego el Modelo Evolutivo Cultural, una herramienta poderosa que nos ayuda a comprender cómo los diferentes niveles de conciencia y formas de pensar influyen en la manera en que las personas y las organizaciones aprenden y se adaptan.
El Modelo Evolutivo Cultural y sus niveles de aprendizaje
Este modelo nos muestra que los seres humanos atravesamos distintas etapas de desarrollo que afectan cómo vemos el mundo, cómo aprendemos y cómo respondemos al cambio. Cada nivel representa un conjunto de creencias y comportamientos que influyen en nuestras preferencias de aprendizaje y adaptación. A continuación, presento un resumen de cada nivel y sus características principales:
1. Nivel Tribal / Colectivo:
Aquí, el aprendizaje se basa en la tradición y la pertenencia al grupo. Las personas asimilan conocimientos a través de historias, rituales y prácticas que refuerzan la identidad colectiva. En el entorno empresarial, la narrativa y los rituales de equipo son herramientas poderosas para quienes se encuentran en este nivel.
2. Nivel Impulsivo / Egocéntrico:
El aprendizaje está motivado por la búsqueda de poder y reconocimiento individual. Las personas responden mejor en entornos competitivos que ofrecen desafíos y recompensas inmediatas.
3. Nivel Estructurado / Normativo:
Aquí, las personas valoran la estructura y la autoridad. El aprendizaje es más efectivo cuando sigue un enfoque claro y ordenado, guiado por expertos. Las instrucciones precisas y los manuales detallados son sus aliados.
4. Nivel Competitivo / Orientado a Resultados:
En este nivel, el aprendizaje está impulsado por la eficiencia y la mejora continua. Las personas se sienten motivadas por resolver problemas reales y aplicar conocimientos prácticos.
5. Nivel Colaborativo / Relacional:
La empatía y el trabajo en equipo son esenciales. El aprendizaje es más efectivo cuando se da en un entorno colaborativo, que fomente el intercambio de ideas y la construcción conjunta de conocimiento.
6. Nivel Sistémico / Integrador:
Las personas en este nivel buscan entender cómo se interconectan los diferentes sistemas. Prefieren un enfoque flexible y adaptativo, donde puedan explorar conexiones entre disciplinas diversas.
7. Nivel Holístico
En el nivel más avanzado, el aprendizaje es holístico y se enfoca en el impacto global y la sostenibilidad. Se busca integrar lo personal, lo colectivo y el propósito más amplio del entorno.
La clave: alinear el aprendizaje con los niveles evolutivos
Uno de los errores más comunes en las organizaciones es tratar de aplicar un enfoque de «talla única» al aprendizaje, olvidando que cada persona opera desde un nivel
diferente del Modelo Evolutivo Cultural. Esta falta de alineación puede llevar a que los programas de formación no logren conectar con los empleados, perdiendo la oportunidad de desarrollar su verdadero potencial.
El verdadero reto está en crear entornos de aprendizaje que sean flexibles y adaptativos, capaces de acomodar los diferentes niveles presentes en la organización. Es crucial respetar y entender que cada persona aprenderá mejor si se le enseña de una manera que refleje y valore su nivel de desarrollo